miércoles, 9 de abril de 2008

Seraphinianus



Ninguna heteropedia de Libros Increíblemente Extraños que se precie puede ignorar el rayantísimo Codex Seraphinianus.
Se trata de 360 páginas de pura insania.
Retomando la tradición medieval de las Sumas enciclopédicas (y tan a menudo heteropédicas y teratológicas, claras predecesoras de la presente) vemos desplegarse ante nosotros minuciosas ilustraciones de objetos extraños, criaturas indescriptibles, floras inauditas y operaciones sumamente enigmáticas.
El primer "capítulo" parece describir un reino vegetal alienígena con árboles migratorios y cosas por el estilo.
El segundo es más faunil, algo así como un libro para niños poseídos.
El tercero sigue a unos bípedos un tanto raros, tal vez manufacturados.
El cuarto trata, como el amor, de física y química.
El quinto de máquinas e "ingenios".
El sexto de antropología extrahumana.
El séptimo parece ser histórico con pequeñas incursiones en los sistemas funerarios.
El octavo parece narrar los orígenes de la escritura peculiar (ahora os hablamos de ello) del Codex.
El noveno es culinario y vestimentario.
El décimo es lúdico.
El onceavo es arquitectónico.
Para complicar aún más el asunto tenemos una serie de minuciosas anotaciones manuscritas... escritas en un alfabeto fantasioso y una lengua incomprensible. Varios linguistas han tratado, desde su publicación de descifrarlo pero sin éxito alguno. Algunas letras parecen remitir a alfabetos semitas mientras que la caligrafía tiene algo que ver con la cursiva georgiana.
Hasta ahora tan sólo se ha podido descifrar el sistema de numerotación de las páginas, una variante en base 21 como demostraran el búlgaro Ivan Derzhanski y su compadre Allan C. Wechsler.
El perpretador de tal aberración es tal vez, como afirman los papeles, el arquitecto y diseñador Luigi Serafini.
Pero aún no nos ha contado de dónde le vinieron las revelaciones de ese inquietante mundo paralelo ni cual es el sentido de su singular advertencia.
Tal vez los Zaziris quieran correr un tupido velo sobre todo este asunto.
Lo cual hace aún más preciada la aparición en nuestro plano espacio-temporal tamaño Objeto "Literario" No Identificado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿¿¿¿¿?????