sábado, 28 de junio de 2008

La División del Placer


La celebérrima banda de Ian Curtis, indiscutiblemente una de las más grandes de la (breve pero ya tan hipertrofiada) Historia del Rock, debe su título, como los más listillos ya sabéis, a un oscuro “paperback” de la Era Dorada, la (Otra) Casa de las Muñecas (House of Dolls, a no confundir con la obra teatral de Ibsen).

Escrita en 1955 por un misterioso "Ka-tzetnik 135633" describía las desde entonces tristemente célebres Divisiones del Placer, grupos de internas judías de los campos de exterminio sometidas a las vejaciones sexuales de los oficiales nazis (pese a todas las directivas nazis contra la unión entre arios y judíos, cimiento y justificación del propio régimen... algo que da para meditar). La existencia de burdeles en diez campos de concentración (entre los cuales Ravensbück y Auschwitz) fuera ya hecha pública por el Ministerio de Información británico en el 45, cuando el descubrimiento y liberación de los mismos (filmados, entre otros, por Alfred Hitchcock!!).

Aparentemente basado en el diario de una prisionera polaca obligada a dicha esclavitud sexual (aunque otros dicen que en experiencias de la propia hermana del autor, muerta en la Shoah, así como el hermano, también sometido a abusos tal y como se relata en Piepel), la obra relata cantidad de atrocidades (prefigurando la Atrocity Exhibition de Ballard que también daría título a uno de los himnos de Curtis).

Yehiel De-Nur (1909-2001), autor de la obra, fue él mismo encerrado en Auschwitz durante dos años, bajo el "nombre" de Ka-Tzentnik ("prisionero de campo" en yiddish) 135633 (el número que los nazis tatuaban en sus víctimas), escogido para firmar sus desoladoras memorias del "planeta de cenizas" (como él llamaba al campo). Fue uno de los testigos llamados a declarar contra el vertugo Adolf Eichmann en el histórico juicio de 1961, aunque, submergido por el dolor, perdió el conocimiento. Durante el resto de su vida, como tantos otros supervivientes, Yehiel sufrió pesadillas recurrentes y depresiones mórbidas. En 1976 se sometió a una psicoterapia psicodélica (sólo en los seventies había de eso!), experimentando con LSD, lo cual le proporcionó las visones que nutrieron su Extrañísimo libro Shivitti...

Por una trágica ironía (que demuestra lo jodido del género humano) el libro fue consumido como pornografía, empezando por la propia Israel (!), donde inició un subgénero Extraño conocido como "Stalags" (campo de trabajo), producidos en masa por Ezra Narkis y consumidos mayoritarmiante por adolescentes, hijos de las propias víctimas descritas (!!). El contexto puritano del gobierno israelí de entonces, así como la conmoción traumática que siguió al detalladísimo juicio a Eichman explicarían (en parte) tamaña fascinación con la transgresión última del supremo tabú (en sintonía, más allá de lo socio-político, con las teorías de G. Bataille sobre el Erotismo).

Perseguidos por la ley cesaron de ser comercializados dos años después del nacimiento del género aunque la oleada de fascinación erótica con los campos se trasladó a Occidente, donde la edición "paperback" de La Casa de Muñecas vendió más de cinco millones de ejemplares. Por ese momento cantidad de Men's Magazines estaban produciendo relatos e imágenes de sexísimas oficiales SS torturando a musculosos americanos y de sádicos y depravados nazis flagelando increíbles pin-ups.

De hecho cuando Joy Division retomó el tema hacía ya cuatro años que triunfara en la gran pantalla Ilsa, la Perra de los S.S (1974), inaugurando el Increíblemente Extraño subgénero de la “porno-esvástica” o “nazi-porn”, capítulo más que polémico (hoy en día impensable, en realidad, fuera de circuitos eufemísticamente denominados "especializados") de la Sexploitation sesentera. En España, el subgénero coincidió con la oleada del "destape", nutriéndola y mezclándose, como en Italia (uno de los principales productores de dichos films), con una siniestra (y para muchos nostálgica) fascinación por la parafernalia fascista...


"Asylums with doors open wide,

Where people had paid to see inside,
For entertainment they watch his body twist,
Behind his eyes he says, 'I still exist.'

This is the way, step inside.
This is the way, step inside..."

1 comentario:

Anónimo dijo...

no creas que no entro en tu blog. Me parece la mar de interesante las cositas que pones. Fuera de lo cotidiano. Y eso me gusta mucho. Cuando tenga más tiempo te mandaré más comentarios. Sigue. Y algunos de mis colegas profes te siguen también. Ya te comentaré lo qeu me dicen.